"—Vine aquí con tantas emociones reprimidas, que estaba nervioso de no ser gentil contigo. Pero, de alguna manera, me suavizaste. Te amo también, hermosa... más que a nada." - Stuck-Up Suit
Hasta que me quedé hipnotizada por el tipo sentado al otro lado del pasillo.
Estaba gritándole a alguien en su teléfono como si gobernara el mundo.
¿Quién se pensaba que era ese arrogante trajeado... Dios?
En realidad, parecía un Dios. Eso fue todo.Estaba gritándole a alguien en su teléfono como si gobernara el mundo.
¿Quién se pensaba que era ese arrogante trajeado... Dios?
Cuando llegó su parada, se levantó de repente y se fue. Tan rápido que dejó caer su teléfono al salir.
Puede que lo haya levantado.
Puede que haya visto todas sus fotos y haber llamado algunos de sus números.
Puede que me haya aferrado al teléfono del misterioso hombre durante días... hasta que finalmente tuve el coraje para devolverlo.
Cuando llevé mi trasero a través de la ciudad a su compañía de lujo, se negó a verme.
Así que, dejé el teléfono en el escritorio vacío fuera de la oficina del imbécil arrogante.
Sin embargo, puede que haya dejado una imagen sucia en el celular.
No esperaba que él respondiera el texto.
No esperaba que nuestros intercambios fueran calientes como el infierno.
No esperaba enamorarme de él... Todo antes que nos conociéramos.
No podríamos ser más diferentes.
Sin embargo, sabes lo que dicen sobre los opuestos.
Cuando finalmente nos encontramos cara a cara, descubrimos que los opuestos a veces hacen más que atraerse, nos consumimos el uno al otro.
Nada podría haberme preparado para el paseo al que me llevó. Y, ciertamente, no estaba preparada para el lugar en que terminaría cuando el paseo llegara a su fin.
Todas las cosas buenas deben llegar a su fin, ¿verdad?
Excepto que nuestro final era uno que no vi venir.
Review: Esta historia me la enviaron hace un tiempo pero la leí hace poco. Me la recomendaron mucho cuando pedí recomendaciones de Vi Keeland y como ya había leído The Baller (ya reseñado) y uno de Penelope Ward que me había gustado, tuve ciertas expectativas.
La historia se centra en Soraya, una joven trabajadora con cabello de colores, independiente y con actitud. Luego de observar a un apuesto hombre en el tren, encuentra el celular de éste y trata de mantener una comunicación que él corresponde. Cuando va a devolverle el teléfono, ellos discuten y Soraya le deja el celular con fotos provocativas en ella, lo que hace que se sigan comunicando. Esto lleva a que tarde o temprano se conozcan y la pasión entre ellos sea muy grande, al igual que los obstáculos que se le cruzan en el camino, sobre todo por la diferencias de clases.
La historia está relatada por ambos protagonistas. Los llegamos a conocer bien y nos enteramos cómo es que ven la relación cada uno de ellos. Aún así la historia me decepcionó. Primero que nada, me hubiera gustado que se demore un poco más el reconocimiento entre ambos ya que se le pudo sacar mucho jugo al asunto, pero se resolvió de manera abrupta y no me gustó como quedó. Además siento que se mezclaron algunas subtramas que no iban al tema y el conflicto prácticamente lo fabrican. Cuando lo lean van a darse cuenta, pero me parece bastante ilógico, sobre todo porque se plantea que hay un parecido muy notable. Vamos, ¿me van a decir que nadie se dio cuenta? Eso sí, me agradó la parte de las cartas. Eso sí me resultó interesante.
Y los personajes... Soraya está bien, pero tiene varias actitudes que no son de mi agrado y me provocan cierto rechazo. Graham me resulta detestable si me permiten ser franca. Y, peor aún, los personajes secundarios son totalmente planos. No hay uno que se salve, son olvidables al punto que ya no recuerdo el nombre de ninguno más que de Genevive y eso que releí el libro.
Como dije arriba: leí el libro con expectativas. Y me decepcionó. Pensé que me iba a gustar, sobre todo porque sentí que la sinopsis era llamativa, pero meh.
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